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viernes, 20 de enero de 2012

De un tiempo a esta parte. Número 0

Compartimos una selección de los poemas e ilustraciones que se han ido desgranando a lo largo de 2011. Hemos creado una revista llamada De un tiempo a esta parte, donde aparecen buena parte de los poemas compartidos.



El blog en sí mismo es un formato efímero, que aunque deje pistas y enlaces, olvidamos pronto su contenido para dejar pasar al nuevo post.

De un tiempo a esta parte pretende dejar una marca más visible, más duradera.

Que os guste.


viernes, 9 de diciembre de 2011

El rey de las máscaras

Se nos ha echado encima el fin de semana, casi sin darnos cuenta. Hemos sobrevivido, cosa que no era nada fácil ni sencilla, a esta interminable semana intermitente, una semana acueductil, al menos aquí en España. Este apunte es para nuestros fieles seguidores que están más allá de nuestras fronteras.

Hoy en Impresiones, volvemos a fijarnos en un dibujo de Adrián Atenza, extraordinario y prolífico autor chileno del que ya os habíamos hablado en otro post. Desde el banquillo de Impresiones, hemos pedido a Ricardo Ossoa que nos regale un poema inspirado en esta ilustración. Ricardo es nuestro colaborador más veterano y aunque él lo esté negando en estos instantes, la verdad prevalece sobre cualquier gesto, ademán o amenaza física que pretenda ocultar la realidad tal y como es. Ahí queda dicho eso.

Poema e ilustración se titulan El rey de las máscaras. Muy interesante y apropiado el título en los tiempos que corren. Una interesante reflexión sobre lo que somos, lo que fuimos, lo que seremos, cómo nos ven o cómo nos vemos cuando elegimos qué cara mostrar a los demás... La ilustración la encontraréis en el fantástico blog Filodopio de Adrián Atenza. A él, un millón de gracias. Os dejamos, como prólogo, con las propias palabras del autor:

"El rey de las máscaras, dibujo en hoja de A4 con tiralíneas, personalmente me siento orgullosos de este dibujo, me llevo un tiempo terminarlo pero valió la pena. Lo que mas me gusta de este dibujo es que expresa bien mi manera de pensar y lo que quiero ser cuando sea viejo, quiero ser mi propio rey de mis máscaras."
Adrián Atenza


Reiré mil veces y lloraré otras mil,
me moriré de miedo y haré que me teman.

Habrá sorpresa en mis grandes ojos abiertos, 
sorprenderé con mis ojos pequeños
a quien no se suele sorprender.

Verteré lágrimas de tinta
y te pediré la lluvia de tus ojos para saciarme.

Seré diabluras y ángel vencido por el mismo diablo.
Estaré triste, beberé enfadado,
reiré de contento y masticaré picarón.

Tendré la cabeza descubierta
y poblada de sueños inútiles.

Mi cabellera será abundante y alocada,
sonreiré pensativo,
pensaré sin sonrisa alguna.

Sangraré y haré que des
tu sangre por nada.

¿Seré de nuevo
ese personaje inventado
que soy?

Mañana, ¿qué cara
mostrará el espejo por mí?

¿Seré otra vez
mi propia caricatura,
ésa que todo el mundo conoce?

Mañana, ¿seré como ayer
o me pareceré más a hoy?

¿O seré ese anciano
que pinta vidas
para los demás?

Me pregunto 
si soy mi propio rey de mis máscaras.

sábado, 12 de noviembre de 2011

Te odio

Compartimos en este sábado de música tranquila, de regateo implacable y constante con los niños por la hora de acostarse, si tarde como defienden ellos, si temprano como imploramos los mayores. Un sábado de discusiones sobre quien debe quitar la mesa o debe recoger los platos, o a quien le toca elegir la película de la siesta. De este sábado surge este superviviente poema huérfano, que ha sobrevivido a sus hermanos mayores, muertos y despedazados en un rincón de la mesa de trabajo.


Una magnífica aunque sombría ilustración tiene la culpa de que ese extraño poema que compartimos hoy sea un tanto agridulce. La ilustración la firma un dibujante chileno bastante prolífico, residente en Santiago de Chile. Se llama Adrián Atenza, y está extraída de su blog Filodopio. Desde aquí nuestro agradecimiento. Sospechamos que volveremos a traerle aquí si a él le parece bien, claro está. También queremos compartir esta interesante reflexión sobre el dibujo que realiza Adrián, pero que creemos que es muy aplicable a la escritura o incluso a misma la lectura:


"Ocupa la linea como tú quieras ocuparla, entonces por dónde empiezo, no sé, tal vez se parte desde el comienzo. Entonces ¿cuándo es el comienzo? No sé, pero un dibujo termina cuando tú lo decides, entonces empieza de la misma forma, al final tómalo como un hecho creativo, un acto de creación y la expresión por si sola es creación, el movimiento es creación, la duda es creación. (...)  ¿Qué es lo importante en el dibujo? Primero que exista, sino existe no es un acto de creación, no es un verbo, no es creación, pero no es necesario que sea permanente, puede ser efímero, da lo mismo, hace el dibujo porque es la evidencia de que algo existe (...)."

El poema está inspirado en una de sus ilustraciones, concretamente la que se titula "Mano suicida", la cual os regalamos a continuación.



Te odio como te quiero,
te necesito
como te desprecio.

Trabajan mis manos para ti.
Blasfeman de dolor
mis dedos inertes.
De ellos se ahorcan
los adjetivos imperfectos
que no te arañan
lo suficiente,
se suicidan
los pequeños poetas 
que una vez creí ser.

Si furtivamente
me sugieres que te quiero,
el tipo duro
que me sostiene
lo negará,
como el infame villano
que es.

Rehuyo de ti
casi tanto como me acerco
a tu intimidad desnuda.


Te admiro 
como te temo,
oh lector.